La iniciativa busca mantener vivo el legado de funcionarios que perdieron la vida en actos de servicio y fortalecer el acompañamiento emocional y espiritual del personal.
La 20ª Comisaría de Carabineros de Puente Alto inauguró este lunes su Sala de Reconocimiento, destinada a honrar a los mártires institucionales que formaron parte de esa unidad. El espacio fue presentado en una ceremonia encabezada por el General Director de Carabineros, Marcelo Araya Zapata, y contó con la participación del delegado presidencial de la Provincia de Cordillera, Osvaldo Maldonado, junto a familiares de funcionarios fallecidos, mandos de la institución y personal de la comisaría.

La iniciativa, presentada como Sala de Reconocimiento o Sala de Bienestar Espiritual, busca mantener viva la memoria de los carabineros que perdieron la vida en actos de servicio, además de ofrecer un lugar de recogimiento y reflexión para el personal activo. La institución afirmó que este tipo de espacios forma parte de una política promovida por la Dirección General para fortalecer el acompañamiento emocional y espiritual dentro de los cuarteles. “Honrar su memoria nos permite valorar el sacrificio que realizaron en cumplimiento del deber”, señaló Carabineros en su comunicación oficial.
Espacio de espiritualidad y contención
Durante la ceremonia, el comisario de la 20ª Comisaría, mayor Matías Cabrera Echeverría, destacó que esta sala “trasciende lo material” y que su creación responde a la necesidad de contar con un lugar donde converjan memoria, espiritualidad y contención. En su discurso, señaló que el proyecto se originó a partir de la visión institucional del General Director, quien ha impulsado la habilitación de espacios similares en distintas unidades del país como parte de un enfoque que busca “fortalecer el alma y el espíritu” del personal.

El mayor Cabrera también mencionó que la sala será un punto de encuentro para los familiares de los mártires de la unidad. Entre ellos, asistieron la viuda e hija del cabo segundo Alfonso de la Cruz Villegas Muñoz, fallecido hace 35 años, quienes participaron en la conmemoración. El comisario indicó que la presencia de estos familiares refuerza el propósito de mantener vivo el recuerdo de los funcionarios que murieron en servicio: “Un carabinero que entrega su vida por Chile nunca es olvidado”, afirmó.
El lugar cuenta con elementos simbólicos, como una imagen de la Virgen del Carmen —patrona de las Fuerzas Armadas y de Orden—, luminarias y bancas destinadas a permitir momentos de oración o descanso. Según explicó el comisario, estos componentes apuntan a que el espacio sea utilizado tanto por el personal operativo como por quienes integran las áreas administrativas de la unidad.

La habilitación de la sala fue posible gracias al trabajo conjunto de equipos de Bienestar, del Departamento de Apoyo a la Familia de los Mártires y del personal de la propia comisaría, quienes participaron en las labores de implementación. El mayor Cabrera agradeció en a las unidades involucradas y aseguró que el espacio “será cuidado con profundo respeto” por quienes integran la 20ª Comisaría.
Con esta inauguración, Carabineros busca consolidar un modelo de acompañamiento que se ha ido extendiendo en distintas unidades del país, con el objetivo de reforzar las instancias de apoyo interno y de mantener un vínculo permanente con las familias de los funcionarios fallecidos en actos de servicio. La sala quedará abierta para uso del personal y para actividades conmemorativas institucionales.




