El principal centro de salud de Puente Alto y del suroriente de Santiago marcó un precedente al implementar esta innovadora técnica quirúrgica en un paciente con artrosis
La intervención, realizada con un brazo robótico y planificación 3D, permite mayor precisión, menos dolor y recuperaciones en pocas horas
El equipo médico espera que esta tecnología contribuya a reducir la extensa lista de espera de prótesis de rodilla en el sistema público
Por años, Jorge Villanueva convivió con un dolor que le impedía trabajar con normalidad. La artrosis de rodilla fue avanzando lentamente hasta que, en enero de 2024, ingresó a la lista de espera del Hospital Sótero del Río. En agosto de ese año fue operado por primera vez con cirugía convencional en la pierna izquierda.
Pero aún quedaba una pendiente: la derecha. En julio llegó nuevamente al hospital. El doctor a cargo de su tratamiento la revisó y le dijo que también sería intervenida, pero ahora iba a ser distinto. El cambio al que se refiere el médico es trascendental: su segunda intervención fue realizada con asistencia robótica, una tecnología inédita en hospitales públicos de Latinoamérica, que el Sótero del Río implementó este 2025.
Puente Alto protagoniza un hito en la salud pública chilena
El Hospital Dr. Sótero del Río, principal centro asistencial del suroriente de Santiago, se convirtió este año en el primero de Latinoamérica en realizar una cirugía de prótesis total de rodilla con asistencia robótica en el sistema público. El procedimiento, según describe la Unidad de Traumatología, incorpora un brazo robótico de alta precisión y un tensiómetro digital que permite evaluar la estabilidad de la rodilla en tiempo real durante la intervención.

Esta tecnología se combina con planificación en 3D basada en tomografía computarizada y tecnología háptica, lo que permite mayor precisión quirúrgica, menos daño en los tejidos blandos y tiempos de recuperación más cortos. “Los beneficios de la cirugía para los pacientes son una mejor flexión de la rodilla y una mayor protección de los tejidos blandos en comparación con las técnicas manuales”, señaló el equipo médico.
La cirugía de prótesis de rodilla es actualmente la que concentra la mayor lista de espera dentro del área de Traumatología del Sótero. Por eso, la implementación de esta tecnología no solo representa un avance médico, sino también una posible vía para aliviar la saturación del sistema. El objetivo: reducir el tiempo quirúrgico y permitir altas hospitalarias en solo horas, liberando camas para nuevos pacientes.
La mejor tecnología del mundo disponible en un hospital público
Para comprender mejor el alcance de esta innovación quirúrgica, el doctor Sebastián Cabrera, jefe del equipo de Rodilla del Hospital Sótero del Río, conversó con Puente Alto Al Día sobre el proceso de implementación, los beneficios concretos para los pacientes y el impacto que esta tecnología puede tener en la reducción de las listas de espera.

-¿Qué significa para usted y su equipo que el Hospital Sótero del Río sea el primero en Latinoamérica en realizar una cirugía de rodilla con asistencia robótica en el sistema público?
A nosotros como equipo de Rodilla del equipo de Traumatología del Hospital Sótero del Río, nos llena de alegría y satisfacción poder contar con la mejor tecnología del mundo para poder resolver la artrosis de nuestros pacientes y realizar la prótesis total de rodilla en la forma más moderna que existe actualmente.
El interés inicial ha sido del grupo por llevar esta tecnología a nuestros pacientes. Sin embargo, el apoyo de la Subdirección Médica, de la Dirección y de todos los demás departamentos del hospital como Abastecimiento, Comercialización, Esterilización e Imagenología, especialmente las tecnólogas de Radio, ha sido fundamental para el desarrollo y la concreción de este proyecto.
También debemos hacer mención a la Jefatura y a todo el personal de Pabellón, que ha sido muy importante en cada paso que hemos dado.
-¿Cómo fue el proceso para implementar esta tecnología en el hospital? ¿Cuánto tiempo tomó y qué desafíos enfrentaron?
Luego del apoyo brindado por la dirección del hospital para este programa, la implementación fueron seis meses debido a que las compras públicas tienen sus temas administrativos y sus tiempos definidos. Pero fue una implementación bastante rápida, tomando en cuenta la envergadura de este proyecto.
Además de ello, hay que destacar que contamos con una contraparte, que es la empresa, que siempre confió en nuestro hospital para el desarrollo de este programa.
-¿En qué se diferencia exactamente esta cirugía robótica de una operación convencional de prótesis de rodilla?
Este sistema robótico de última generación se alimenta de las imágenes reales del paciente, y gracias a ello permite realizar una planificación preoperatoria ajustada a la realidad de cada rodilla.
Además tiene un sistema de seguridad que, frente a la realización de los cortes óseos, cuando detecta que estamos pasando más allá de donde debemos cortar activa un frenado automático, lo que significa que protege al paciente y nos da mayor seguridad en la realización de la prótesis total de rodilla.
-¿Qué ventajas concretas ofrece para los pacientes en cuanto a recuperación, precisión o dolor postoperatorio?
Esta tecnología trabaja con una precisión en la planificación quirúrgica de 0,1 milímetro. Esto se traduce finalmente en una cirugía con menos sangramiento y menos daño quirúrgico. Es una cirugía que en los últimos trabajos de la medicina basada en evidencias se ha visto que da mejores resultados a mediano y a largo plazo, por cuanto permite que al tener menos dolor y menos sangramiento los pacientes se puedan ir de alta a las cuatro horas de la cirugía.
-¿El uso del robot acorta el tiempo quirúrgico?
Inicialmente el tiempo quirúrgico es un poco mayor por todo lo que significa el posicionamiento del robot, pero a corto y mediano plazo los tiempos son muy similares a lo que es la prótesis convencional.
-¿Se requiere capacitación especial para los profesionales?
Para el uso de esta tecnología se necesitan cursos de formación y acreditación de todo el personal: cirujanos, anestesistas, enfermeras, entre otros.
-Se mencionó que la cirugía de rodilla es la que tiene la lista de espera más extensa en su unidad. ¿Cómo esperan que esta tecnología impacte en ese problema?
Efectivamente la lista de espera más importante que tiene nuestra Unidad de Traumatología es la de prótesis total de rodilla. Y con esta tecnología, al poder realizar la gran mayoría de cirugías de forma ambulatoria nos libera camas.
Esto quiere decir que las camas de hospitalización se pueden utilizar en otros procedimientos, y así optimizar de mejor manera los espacios hospitalarios y poder realizar más cirugías de este tipo en nuestro hospital mensualmente.
-¿Este avance podría replicarse en otros hospitales públicos del país?
Es posible replicar esta tecnología en otros hospitales públicos, pero ello va a depender fundamentalmente del convencimiento de la dirección de aquellos centros de salud que crean en un proyecto de esta envergadura para su realización.
-¿Cómo fue la experiencia con el primer paciente operado? ¿Qué sintieron al ver el resultado?
La primera cirugía robótica en nuestro hospital despertó una gran atención y expectativa en los funcionarios, en la Dirección, en el Pabellón y en muchas dependencias del hospital. Todo el mundo estaba muy pendiente de lo que estaba ocurriendo.

Lo mejor es que fue un procedimiento sin ningún tipo de incidente, más rápido de lo pensado y más expedito también. Y claro, ver a don Jorge Villanueva (el primer paciente) contento y con su problema resuelto fue muy gratificante para todo el equipo.
-¿Qué le diría a los usuarios del sistema público que esperan una cirugía de este tipo?
El mensaje que me gustaría darle a todas las personas que están esperando por esta cirugía en nuestro hospital, es hacerles saber el compromiso que nuestro equipo tiene para realizar las gestiones al más alto nivel para poder resolver lo más rápido posible toda la lista de espera con esta nueva tecnología, que es la mejor del mundo.
“Me siento orgulloso de haber tenido esta oportunidad”
A Jorge Villanueva le explicaron que la nueva operación sería distinta: menos invasiva, más tecnológica y con posibilidad de irse a casa en pocas horas. Y así fue, a las cuatro horas de la cirugía ya estaba listo para volver a su vida.
“No tenía idea que iba a ser el primero en usarla, pero me siento orgulloso de haber tenido esa oportunidad”, afirmó Jorge, según recoge un comunicado divulgado por el hospital. Su testimonio es, quizás, el reflejo más claro del impacto que puede tener este tipo de avances en la vida de miles de pacientes del sistema público.
En una realidad donde las listas de espera siguen siendo una de las principales preocupaciones del sistema de salud, la experiencia del Sótero del Río con cirugía robótica abre una puerta de esperanza. La tecnología, bien implementada, puede marcar una diferencia real. No solo en números, sino en historias como la de Jorge.