El mensaje de Monseñor Alberto Lorenzelli Rossi se caracterizó por una invitación a la unidad, la corresponsabilidad ciudadana y la construcción de un país más humano, enmarcado en el ejemplo de la parábola del Buen Samaritano.
La comuna más grande de Chile celebró por todo lo alto el 215° aniversario de la Primera Junta Nacional de Gobierno con una emocionante jornada que combinó tradición, música, desfile institucional y gestos inéditos.
El senador evocó sus años como alcalde y criticó la falta de unidad en las celebraciones, mientras el edil puentealtino restó importancia a las críticas y aseguró que no era necesario invitarlo.
El mensaje de Monseñor Alberto Lorenzelli Rossi se caracterizó por una invitación a la unidad, la corresponsabilidad ciudadana y la construcción de un país más humano, enmarcado en el ejemplo de la parábola del Buen Samaritano.
La comuna más grande de Chile celebró por todo lo alto el 215° aniversario de la Primera Junta Nacional de Gobierno con una emocionante jornada que combinó tradición, música, desfile institucional y gestos inéditos.
El senador evocó sus años como alcalde y criticó la falta de unidad en las celebraciones, mientras el edil puentealtino restó importancia a las críticas y aseguró que no era necesario invitarlo.
El mensaje de Monseñor Alberto Lorenzelli Rossi se caracterizó por una invitación a la unidad, la corresponsabilidad ciudadana y la construcción de un país más humano, enmarcado en el ejemplo de la parábola del Buen Samaritano.
El senador evocó sus años como alcalde y criticó la falta de unidad en las celebraciones, mientras el edil puentealtino restó importancia a las críticas y aseguró que no era necesario invitarlo.