Por más de una hora estuvieron reunidos el presidente Gabriel Boric, la ministra de Defensa, Maya Fernández, y el comandante en jefe del Ejército, Javier Iturriaga, durante la tarde del viernes en el Palacio de La Moneda.
A eso de las 16:00 horas comenzó la cita en la que el general dio cuenta de todos los detalles de la fatídica marcha del pasado 27 de abril, en que el conscripto Franco Vargas, de 19 años, falleció en medio de un entrenamiento militar de la Brigada Motorizada Nº24 Huamachuco en Putre.
Asimismo, la cuestionada instrucción, resultó con otros 40 conscriptos con un grave cuadro respiratorio y a un joven que sufrió la amputación de una extremidad, en el Hospital Militar de Santiago.
La decisión de respaldar al comandante en jefe del Ejército la comunicó la ministra Fernández. En un punto de prensa posterior a la reunión, la ministra de Defensa informó que el presidente solicitó celeridad en la investigación y toda la colaboración del ejercito.
“Hemos instruido al Ejército colaborar, apoyar a las familias y sobre todo entregar todos los antecedentes que permitan esclarecer lo ocurrido pensando en las familias”, aseguró la ministra Maya Fernández.
También informó que, desde el pasado jueves, el gobierno trabaja junto a la institución militar en una mesa de trabajo especial para que estas situaciones no se vuelvan a repetir.
“Hemos llevado adelante una mesa de trabajo liderada por el Ministerio de Defensa, específicamente la Subsecretaría para las Fuerzas Armadas, para la revisión de protocolos, porque no queremos que estos hechos ocurran en ninguna parte de Chile”, indicó.
Por último, se comunicó que el presidente aceptó la renuncia del general de brigada Rubén Castillo y el coronel Sebastián Silva, por ser sindicados como los responsables por “falta de diligencia” y “omisiones para pesquisar adecuadamente y en un tiempo prudente falsedades y tergiversaciones”, manifestó el general Iturriaga.