Luis Cáceres, el “Chuma” lleva ligado más de tres décadas al ambiente musical. Hoy, pese a enfrentar dificultades de salud -que afectan su movilidad- asegura no dejará por nada su gran pasión.
Un puentealtino de tomo y lomo es Luis Cáceres Martínez, más conocido popularmente como el “Chuma”, músico que comenzó a dar sus primeros pasos en bandas de rock de la comuna por mediados de los años ‘80, con su banda “Corruptos”, de tendencia más ligada a los sonidos punks de la época.
“Recuerdo tenía como 14 o 15 años cuando con unos amigos formamos la agrupación, éramos súper cabros. La primera tocata la hicimos en Eyzaguirre, en una casa que estaba en unos cités, al lado del río. Eso como por el ‘84 más menos, en la que también tocaron grupos de thrash metal. Con los amigos siempre nos juntábamos afuera del Acuarela, un local bien conocido acá, frente a la plaza de Puente Alto”, comenta.
Junto a Corruptos, el “Chuma” compartió escenario con bandas que hoy son bastante reconocidas, como Fiskales Ad-Hok Vandalik y Ocho Bolas (Valparaíso). Cuenta que también tocaban con otras agrupaciones de la capital, las que invitaban a Puente Alto, en locales como el Okinawa.
“Si bien tocó guitarra y bajo, la batería es lo que me llena”, indica. “Por esos años era muy difícil poder comprar un instrumento, o incluso conseguirse uno. Mi primera batería, ¡la armé con tarros de pintura! Y le hice unas pedaleras amarradas con elásticos, y así todo, ¡me la pedían para ensayar otras bandas! Todo era muy precario por esos años”, agrega.
Pese a las adversidades, admite que esos tiempos fueron muy bonitos, puesto que había una hermandad y una muy buena onda entre los grupos y la gente que seguía estos estilos de música más “radicales” para esos años. “Nos intercambiábamos discos, se hacían amistades, la escena era bien unida. También incluso llegamos a editar una revista, de forma independiente (…) Ya llevo como tres décadas en esto, siempre ligado a este mundo, compatibilizándolo con mis trabajos, los que generalmente son de noche”, comenta.
AMISTAD Y SOLIDARIDAD
Luis presentó en el último año complicaciones de salud, las que lamentablemente derivaron en la amputación de su pierna izquierda, algo que como baterista, fue un golpe muy duro. Dice que el mundo se le vino abajo, a lo que se sumó el corte del tendón de uno de sus dedos índice, lo que le complicaba a la vez poder tomar las baquetas.
La delicada situación por la que atravesaba el “Chuma”, motivó a vecinos, conocidos y amigos a hacer algo para ir en su ayuda, y así fue como se organizó en Casas Viejas el pasado 4 de diciembre el Festival “Cultural Familiar Casas Viejas Solidario”, que contó con las presentaciones de las bandas Área Sucia con su rock latino, los experimentados Ayllá, de gran trayectoria musical, Jorge Céspedes, “El Manguera”, reconocido payador, el grupo de bailes Codachi, el solista de música electrónica Alfredo Berrios y el rock de Militares y Civiles, entre otras, en el cual Luis hizo acto de presencia junto a su familia, sorprendiendo a todos al colocarse tras la batería e interpretar un par de canciones junto a una de las agrupaciones participantes.
“Estoy muy agradecido de los amigos, vecinos, por su solidaridad. Agradezco también a mi familia, a mi hijo Dante, que va a todos lados conmigo, es mi fan número uno, así como mi nieta. Pronto comenzaré mi proceso de rehabilitación, en la cual me facilitarán una prótesis también. ¡Quiero retomar la música de todas maneras!”, concluye el “Chuma” emocionado.