Personal de emergencia de la Compañía repuso cerca de un kilómetro de cable robado. La interrupción de servicio afectó a más de doscientos clientes.
En el marco del trabajo permanente que realiza CGE en materia de calidad de servicio en las 19 comunas de la región Metropolitana donde está presente, personal de la Compañía concurrió este lunes hasta el sector de Calle Llongol en la comuna de Puente Alto alertados por reclamos de los clientes. En este lugar desconocidos robaron más de 90 metros cable de cobre perteneciente a las redes de Media Tensión, afectando la continuidad de servicio eléctrico de más de doscientos clientes.
Elliot Acevedo, jefe de la delegación Cordillera de CGE, alertó sobre la condición de peligro asociado a este robo de cable en una línea de Media Tensión que tiene 12 mil voltios y que dejó sin servicio a más de doscientos clientes. En este caso – indicó el profesional – está en riesgo la vida de las personas que perpetraron este delito y también pone en riesgo a la comunidad en general, al ser una intervención de los sistemas de distribución y de seguridad de la red en instalaciones que tienen alto voltaje.
El profesional indicó que, en los últimos años, el robo de cables ha experimentado un crecimiento importante, actualmente la mayoría de los robos de cables se producen en instalaciones de Baja Tensión, pero en este caso, hablamos de bandas organizadas, que cuenta con los conocimientos y equipos, para cometer este delito que afectó una red de Media Tensión lo que es muy complejo.
“Estamos ante la presencia de bandas organizadas, que están presentes en la comisión de este tipo de delitos que tiene conocimiento eléctrico, porque no cualquier persona intervine nuestras redes de Media Tensión. Las comunas donde tenemos más robo de cable en la zona metropolitana oriente son La Pintana, Puente Alto y San Bernardo”, explicó.
Elliot Acevedo llamó a la comunidad a avisar oportuno a la Compañía o a las policías, ante situaciones sospechosas, como: personas con indumentaria eléctrica que no porten credenciales o que estén operando en horas poco habituales, en la noche o fines de semana. En segundo lugar, el profesional solicitó no ingresar por ningún motivo al sector donde se cometió un robo de cables por los riesgos asociados.
“Ante la presencia de un robo de cables es importante que nuestros clientes se comuniquen con CGE a través de cualquiera de los canales de contacto establecidos por la Compañía o con Carabineros de Chile. Lo segundo no acercarse por ningún motivo al sector, hasta que nuestro personal normalice las instalaciones y se descarte la presencia de cables energizados”, comentó.
Antecedentes
Durante el primer semestre de este año CGE registró a nivel nacional 671 eventos de robo de cables, con casi 100 kilómetros de redes eléctricas sustraídas, situación que afectó la continuidad de servicio de 110.000 clientes. La infraestructura dañada o destruida alcanzó a 2.295 millones de pesos.
En las 19 comunas donde CGE entrega energía en la región Metropolitana se contabilizaron 3.533 metros de cable robado, equivalente a dos toneladas de cable de cobre, que son el resultado de 27 actos ilícitos con 6 actos vandálicos en líneas de Baja Tensión y 21 robos de cables en Líneas de Media Tensión. Las comunas con mayor presencia de estos delitos son San Bernardo, Puente Alto, La Pintana y Buin.
