Se demolieron 25 mil armas, las que serán fundidas y convertidas en acero verde.
En un claro mensaje sobre la prioridad de la seguridad en todas sus dimensiones, el Presidente Gabriel Boric encabezó una importante iniciativa: la destrucción masiva de armas en un esfuerzo conjunto con diversas instituciones del Estado.
En este evento histórico, se demolieron un total de 25 mil armas y accesorios, marcando la cifra más alta desde 1990 y representando un aumento del 39% con respecto al año anterior.
“Estamos aquí porque sabemos que un país con menos armas en manos equivocadas es un país más seguro”, afirmó el Mandatario durante la ceremonia, destacando la importancia de esta acción en la lucha contra la delincuencia y el narcotráfico.
De las armas destruidas, ocho mil fueron decomisadas por las policías y los tribunales de justicia, reflejando un contundente golpe a la criminalidad organizada. El Presidente Boric resaltó la colaboración ciudadana al informar que 13 mil armas fueron entregadas voluntariamente a la Dirección General de Movilización. “Saludo la conciencia cívica de estos 13 mil ciudadanos y ciudadanas que han entregado voluntariamente su arma para ser destruida y sacarla de circulación”, afirmó.
Además, cerca de tres mil armas corresponden a armamento fiscal dado de baja por las policías. El líder de Gobierno resaltó el enfoque sostenible de esta acción, indicando que estas armas se funden y convierten en acero verde utilizado para construir hospitales, carreteras y otras infraestructuras esenciales para la ciudadanía.
Boric hizo hincapié en que la fiscalización de armas es un componente fundamental en la estrategia contra la delincuencia y el narcotráfico. Gracias al plan de fiscalización y al aumento de las capacidades de las fuerzas policiales, se ha logrado un incremento significativo en el número de armas fiscalizadas en comparación con el año pasado.
“Tengo claro que nuestros compatriotas esperan de sus autoridades decisión y mano firme, acciones concretas para terminar con el tráfico de armas y quitarle poder de fuego a los narcos. Con el narco no se negocia, se le enfrenta, y eso es lo que estamos haciendo aquí”, concluyó el Presidente.
